La familia ha sido considerada por décadas como el núcleo de la sociedad en occidente. Sin embargo, en el caso latinoamericano las familias se caracterizan por su diversidad, marcada por las particularidades de las sociedades de nuestra región que en muchos casos provoca que la convivencia dentro de esta se vuelva conflictiva. Reinas, Sueño mexicano, El archivo bastardo y Algo viejo, algo nuevo, algo prestado son filmes que nos invitan a conocer a las familias latinoamericanas en su multiplicidad de formas y problemáticas.
Reinas, de la directora peruana Klaudia Reynicke, esta ambientada en la Lima de inicios de los 90’s, durante la época más violenta de la historia reciente peruana; esta es la razón por la que la madre de Lucía y Aurora desean dejar el país, y para ello necesitan la firma de su padre ausente, Carlos. Él aprovechará el poco tiempo que le queda junto a ellas para reconectar y recuperar el amor de sus hijos. Con una dirección de arte que te sumerge en la época, Reinas logra construir un drama familiar cálido que te hace empatizar tanto con el miedo de las niñas por abandonar su país, y la necesidad de su padre por volver al lugar que el cree que le corresponde.
Malena también desea reconectar con sus hijos en el documental de Laura Plancarte, Sueño mexicano, después que su exmarido aprovechará la situación para obtener la custodia de los niños. Ahora Malena sueña con construir su casa propia donde vivir con sus tres hijos y un nuevo bebé concebido mediante fecundación in vitro acompañada de su nueva pareja. A lo largo del documental, somos testigos del día a día de Malena mientras lucha recuperar a la familia que ha perdido y poder reunirla con su nuevo presente. Víctima de una relación abusiva, buscará demostrar que a pesar de sus errores del pasado es capaz de liberarse de la necesidad de depender a alguien y formar su propia familia con ella y sus hijos en medio.
La familia también puede ser objeto de exploración como lo demuestra Marianela Vega Oroza en El archivo bastardo, un documental autobiográfico que revisita la relación con su padre a través de las películas caseras que él grababa. El archivo bastardo conecta el pasado con el presente de tal forma que las incomodidades propias de la intimidad de la vida familiar se vuelven propias. La incapacidad de demostrar la vulnerabilidad de su padre a costa de enseñarle a su hija la fuerza para enfrentar la vida genera heridas que Vega analiza desde la distancia que el paso del tiempo y la lejanía con su padre le han generado.
Maribel Felpeto, la protagonista de Algo viejo, algo nuevo, algo prestado, realiza un ejercicio de exploración similar, pero para descubrir el porqué de la muerte de su padre, Hugo, el patriarca de los Felpeto, una familia dedicada al negocio de las apuestas clandestinas. Cuando el barrio se ve inundado con rumores de posibles redadas en contra de las mafias de apostadores, los Felpeto buscarán asegurar sus ganancias, mientras Maribel investiga los secretos familiares. Hérnan Roselli combina la narración tradicional con el found footage para crear una película de mafiosos adaptada a la precaria realidad latinoamericana, donde la familia muchas veces, no lo significa todo.
Estos largometrajes presentes en el 28 Festival de Cine de Lima PUCP, nos muestran las distintas realidades que viven las familias latinoamericanas. Puedes conocer más sobre estas y otras películas en festivaldelima.com.